PARAGUARÍ. Algo de no creer lo que sucedió en la ciudad de Mbuyapey. Un joven de 24 años había fallecido y los familiares acudieron hasta la iglesia local con intenciones de darle el último adiós, pero algo no estaba previsto por nadie.
La señora Blasia Ávalos contó a Crónica sobre el insólito suceso: “Fuimos con la intención de solicitar el responso del fallecido y el padre Ramón Estigarribia se negó a realizar dicho acto religioso”, explicó.
“Fuimos en caravana a despedir a mi sobrino y grande fue nuestra sorpresa al encontrar la iglesia totalmente cerrada y con candado”, agregó la mujer.
Dijo que todos quedaron muy sorprendidos y que se quedaron ahí con el cajón del muchacho en la carrocería de una camioneta sin saber qué hacer.
“Nadie se explicaba el motivo del porqué este servidor de Dios procedió de esta manera. Existen muchas quejas en contra del pa’i Ramón”, afirmó la denunciante, comentando que muchas personas se quejan de la manera prepotente en la que suele actuar el párroco.
“Mi sobrino estuvo postrado a una silla de ruedas toda su vida y que el cura actúe de esta manera nos pareció injusto”, agregó la tía y especuló que el trasfondo es por una disputa por unas tierras que le habían dejado en un testamento al joven. Para hoy se tenía prevista una manifestación frente a la iglesia, por lo sucedido.
Fuente: www.cronica.com.py